2025-11-19
Google lanza su nuevo modo IA en España
La introducción del modo de IA de Google marca un cambio fundamental en el marketing de búsqueda. Esta experiencia conversacional va más allá de los clics tradicionales, ofreciendo respuestas contextualizadas y sintetizadas en una conversación real sin clics. El éxito ahora depende no solo de entender a los usuarios, sino también de comprender las nuevas herramientas de IA que les guían.
Un nuevo enfoque de búsqueda conversacional, multimodal
Google acaba de incorporar en su producto de búsqueda el modo IA, un nuevo enfoque de búsqueda conversacional, multimodal, es decir, que la consulta puede ser mediante texto, imágenes o voz, y que utiliza un razonamiento mejorado basado en inteligencia artificial. Esta es la manera que tiene Google de acercar su popular chatbot Gemini a todos los usuarios que usan Google Search.
La irrupción que ha supuesto la aparición de aplicaciones como ChatGPT, Perplexity, Deep Seek, etc., ha hecho que se tambaleen los cimientos de un ecosistema que vive uno de los momentos de cambio más profundos desde su aparición allá por los comienzos de los años 2000. Esta irrupción tecnológica está transformando la manera en la que los usuarios y consumidores usamos la tecnología, y cómo nos relacionamos con ella. Las consecuencias son muy diversas y tienen efectos a todos los niveles: impacto en el cambio en la experiencia de usuario, creadores de contenido y medios digitales, anunciantes y mercado publicitario, impacto tecnológico, etc.
Pero como profesionales del marketing en buscadores, vamos a centrarnos en las consecuencias que tienen para las marcas y la relación con el consumidor en esta nueva era de la búsqueda conversacional.
El final del clic como moneda de cambio
Desde que Google empezó a incorporar en su buscador elementos no clickables (preguntas relacionadas, panel de conocimiento etc..) fue cuando se comenzó a hablar de las búsquedas zero-click. Gracias a estos elementos el usuario puede encontrar la información deseada después de realizar la consulta sin visitar ninguno de los enlaces que se muestran en el listado de la página de resultados. Con la aparición de las AI overviews y AI mode este tipo de búsquedas se están incrementando de manera exponencial ya que pasamos de un sistema en el que cada búsqueda de texto se relaciona siguiendo el patrón click-visita-conversión a otro en el que la búsqueda abre una conversación fluida donde el click desaparece. Con esta nueva modalidad conversacional el usuario recibe una respuesta con menos esfuerzo, más sintetizada, y mucho más contextualizada. Los datos son todavía bastante preliminares, pero ya hay estudios, como por ejemplo de Similar Web en USA, que indican que las búsquedas sin clic han pasado del 56% al 70% desde el lanzamiento de AI overviews. Todavía queda esperar a ver el impacto que tiene el lanzamiento de AI mode.
La base del marketing en buscadores cambia completamente. La plataforma de búsqueda es una herramienta para encontrar información sobre productos y servicios mediante un listado de links para acceder a las pagina. En este nuevo entorno la plataforma se convierte en un prescriptor muy poderoso de nuestros productos, servicios, e incluso de la propia marca. La conversión ya no se asocia a un solo elemento, una búsqueda o una keyword sino que se asocia a una construcción mucho más compleja y contextualizada, una respuesta.
La marca y la percepción que tengan las propias plataformas conversacionales de IA serán fundamentales a la hora de tener éxito en el futuro del marketing en buscadores. Es por eso que aquellas que ya estén consolidadas y tengan una autoridad reforzada tendrán una ventaja competitiva en estos primeros pasos de la búsqueda conversacional.
Mucho contenido, poco espacio
Además, la limitación del espacio y la menor visibilidad que se puede alcanzar en una respuesta generada por IA en comparación con los resultados tradicionales de búsqueda es otro de los cambios que afectará de forma fundamental a cómo entendemos el éxito en una estrategia de search. Mientras que en la página de resultados tradicional había distintos puntos de contacto con el usuario —listado orgánico, anuncios, fragmentos destacados, etc.—, en el modo conversacional el usuario puede llegar a resolver su duda con una única interacción que reduce drásticamente las posibilidades de visibilidad para las marcas. En un entorno donde el espacio de exposición se comprime y la atención del usuario se concentra en una sola respuesta, posicionarse como una referencia en la mente de la IA se vuelve más importante que nunca.
Esto representa un nuevo reto para las marcas: ya no es solo necesario estar ahí cuando el usuario busca, sino formar parte del discurso que el modelo recomienda activamente. Y para lograrlo, las estrategias de marketing deberán adaptarse para generar valor no solo a los motores de búsqueda, sino a los modelos de lenguaje que los impulsan.
De entender al usuario, a entender al modelo
En este nuevo escenario, la optimización ya no depende exclusivamente de conocer a fondo al usuario y su intención, sino también de entender cómo los modelos de IA están interpretando a las marcas y a sus competidores.
Desde Jellyfish hemos desarrollado una herramienta pionera que ayuda a cubrir este vacío: Share of Model™. Esta herramienta permite identificar cuáles son los atributos que los modelos LLM asocian a las marcas, facilitando la comprensión de cómo están siendo representadas en las narrativas generadas por IA. Estos insights son clave, no solo para redefinir y afinar las estrategias de marketing, sino también para inspirar el desarrollo de nuevos conceptos creativos basados en la manera en que los modelos “perciben” la propuesta de valor de la marca.
En definitiva, el lanzamiento de AI mode en España marca un punto de inflexión para el marketing digital. Supone tanto una amenaza para los modelos tradicionales como una oportunidad para aquellos que sepan adaptarse rápido y entender que, en la era de la inteligencia artificial conversacional, la autoridad ya no solo se construye para los usuarios, sino también —y cada vez más— para las máquinas que los asisten.
